La importancia de no estudiar teología
Por: Carl Trueman
(Tomado de Themelios, Edición 35; Referido por Eduardo en Sujetos a la Roca)
“Además el estudio de la teología de modo abstracto puede conducir a tener como objetivo ella misma. A Lutero una vez se le preguntó qué diferencia había en los que él creía y en lo que creía el Papa. En cierto nivel, contestó, no hay diferencia: los dos creemos en Cristo, el Hijo del Dios, que vino a la tierra, se hizo carne, murió en la cruz, se levantó de los muertos, ascendió el cielo y regresará. ¿Dónde está la diferencia? En que yo creo que él hizo estas cosas por mí, fue la respuesta de Lutero.
“El aspecto que Lutero estaba destacando era hacer ver que el Papa poseía una teología objetiva en el sentido de que ya no poseía esa dimensión personal que hizo que él revisara su propia comprensión de sí mismo y, últimamente, resultara en adoración y reverencia. Al principio de los Institutos de Calvino, encontramos lo mismo, su declaración en cuanto a la íntima conexión e interdependencia sobre el conocimiento que tenemos de Dios y de nosotros mismos: No tiene nada que ver cómo algunas veces se ha argumentado, con la moderna preocupación por la contextualización, pero sí con la conexión de nuestra identidad y la de Dios, obligándonos a pensar que la teología no es algo abstracto y desconectado de lo que somos delante de Dios.
La respuesta a esa equivocación no es abandonar la meta en el estudio de la teología; es más bien convertir el estudio de la teología en nuestra meta. Tenemos la tendencia equivocada de hacer de lo que aprendemos cada día lo más importante. Sin embargo esto confunde el verdadero proceso cronológico de aprender con el orden real de las cosas. El estudio de la teología no consiste en un movimiento y persecución más allá desde donde comenzamos nuestras vidas cristianas; consiste más bien en una reflexión sobre el fundamento sobre cual ya somos cristianos. Aunque parezca extraño decirlo el fin es el mismo principio. Comienzo confesando con mi boca que Jesucristo es el Señor y creyendo en mi corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, y puede estar seguro que nunca voy más allá de eso. Toda mi teología, todo mi estudio, es simplemente una reflexión de todo lo que descansa detrás de esa confesión. Así, nunca voy más allá de la alabanza, nunca dejo detrás la adoración del Dios viviente; lo que hago es aprender más y más acerca de la profundidad de esos fundamentos sobre los cuales la alabanza y la adoración descansan, y que también todos los creyentes comparten comenzando desde el más brillante hasta el más humilde".
Estimado pastor Humberto, por aquí de vuelta, visitansdo du blog, en verdad que me regocijo con esta entrada, hoy muchos son teólogos "profesionales", pero esa teología se ha convertido en fin en sí misma, creo que la teología debe estar siempre acompañada por la piedad, porque tener teología sin piedad es como tener un árbol grande sin ninguna raíz. Bendiciones y saludos a su familia.
ResponderEliminarDios le bendiga pastor Edinson. ¿Qué tal la obra de Dios en Venezuela? ¿Recibe el pueblo la Palabra de buena gana? Saludos.
ResponderEliminarhermano, trabajando con denuedo y regocijo, sabiendo, aunke se nos ha abierto puerta para la predicación, son no pocos los adversarios, confiamos en Dios ke seguiremos adelante, yo sigo con mi trabajo de obrero, pero sin descuidar la otra viña donde también soy obrero, cuyas implicancias no son terrenales sino eternas, bendiciones pastor.
ResponderEliminarDios le bendiga mucho hermano Edinson, y en ambos trabajos. Dice la Escritura que "no es de todos la fe"; y también dice que "nada podemos contra la verdad sino por la verdad". Dios bendiga a Venezuela.
ResponderEliminarHola Pastor, soy un estudiante de Teología y mi opinion personal es que la teología es la columna vertebral de la fe del cristiano y estoy totalmente de acuerdo con este artículo suyo. Dios le bendiga
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