¿Cuántos ángeles quieres? ¿Uno o 72,000?

Mateo 26: 53
“¿O piensas que no puedo rogar a mi Padre, y El pondría a mi disposición ahora mismo más de doce legiones de ángeles?”.

¿Cómo se pueden explicar estas palabras con la oración en los vv. 42-44? Eso indica que Jesús no perdió su confianza en la oración por el hecho que el Padre le negara lo que le había pedido. Si algo no es posible no hay que descorazonarse y perder la fe y la confianza en la oración propia. Ni en la de aquellos que nos acompañan. Aunque sea un silencio por no. Si Dios le envió un ángel para fortalecerle (Luc. 22: 43) podría enviarle 72000 ángeles si la legión la formaban 6000. Algunas veces 4200 ó 5000. Lo que quiere decir es una invencible ayuda.

Tal vez los discípulos vieron al ángel que le visitó o lo supieron después, y usando una especulación, quizás pensaron que ahora un solo ángel no sería suficiente contra todos aquellos y haría falta más ayuda celestial, como si la más pequeña fuerza de Dios no pudiera más que todos juntos, y sólo un dedo (Luc. 11: 20) no fuera bastante para derrotarlos. No subestimemos a Dios. Nuestras oraciones, porque Dios lo quiere, algunas veces logran mucho y otras menos. Siempre logran.

Cuando Dios hace poco no significa que no pudiera hacer más. En realidad nunca es poco, poco es como nos parece pero en realidad un ángel es más que suficiente. Aquel solo ángel fue una representación de Dios, o sea, representaba su presencia y eso fortaleció al Señor. Debemos estar satisfechos cuando no hace más porque eso interferiría su voluntad. La voluntad divina pudiera ser menos y no más. Uno a veces quiere más participación de Dios en nuestros asuntos y no lo logramos porque él no quiere, él sabe hasta dónde debe meterse o interferir. Es mejor no cambiar nuestro destino sino fortalecernos para asumirlo. Conozcamos nuestros límites y los límites de Dios, y que la oración no es omnipotente sino quien la contesta. ¿Cuántos ángeles quieres para estar complacido?

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