Jesucristo es nuestro arcoíris


Génesis 9:8-17
“Pongo mi arco en las nubes y será por señal del pacto entre yo y la tierra. Y acontecerá que cuando haga venir nubes sobre la tierra, se verá el arco en las nubes”.

Hoy sabemos que el arcoíris es un fenómeno natural, un prisma de agua suspendido en la atmósfera a través del cual pasa la luz blanca y se descompone en sus preciosos colores; no es un fenómeno milagroso sin embargo es usado por Dios como una señal de un pacto con el hombre de que no volvería a destruir la tierra con agua para  que el hombre pudiera mirar el cielo sin miedo y no se asustara cuando viera llover, es una promesa de paz y  que ha entrado en acción su misericordia.

Este no es el origen del arcoíris sino de un pacto. Este texto es muy primitivo. Parece una porción sermonaria, como anteriormente se ha dicho con relación al arrepentimiento de Dios: esas expresiones de "me acordaré del pacto" "yo lo veré y me acordaré" es una personificación verbal del hecho en sí; Dios no tiene que mirar el arcoíris para acordarse de nada. Y dicho de forma más sublime, nos mira a nosotros a través de Jesucristo, que es nuestro arcoíris, y cuando nos  ve pecar cambia sus ojos y mira la cruz donde juzgó nuestros pecados.

Comentarios

  1. ¡Qué lindo post, querido hermano! y recordaba que cuando ya siendo una niña de 11 años, escuché por primera vez esta historia y yo la escuchaba como el inicio de el arco iris, pero al crecer, puedo llegar a la misma conclusión de este hermoso post: "Este no es el origen del arcoiris, sino de un pacto"
    ¡Gracias, querido pastor por recordarnos la maravillos historia de amor por nosotros en la cruz!

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  2. ¡Qué bueno Isa, que disfrutaste esa pequeña entrada! Bendiciones para ti y los tuyos.

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