Había una vez, en un país muy lejano…un blog


Tengo un blog pequeño, con unos cuantos añitos, no le he hecho arreglos al formato nunca porque no quiero invertir dinero en hacerlo más atractivo. Si me decidiera algún día cambiarlo por otro más bonito, elegante y periodístico, lo extrañaría. Pero ¿qué pasaría si el contenido no es bueno ni mejor? Si lo que escribo en papiro no es bueno ¿para qué gastar dinero en pergaminos? Lo importante de un blog no es el atractivo envase comercial sino su contenido. Cada bloguero tiene su gusto, su estilo y su propósito. Yo soy un irremediable expositor de la Palabra de Dios y rara vez, como ahora, inserto algo que no sea una exposición bíblica o pasajes de libros que haya estado leyendo. 

Cuando llego a un blog, en castellano o en inglés  y veo que el asunto es temático y que son opiniones y sabiduría de su autor, y que tengo que ir al centro de la larguísima página, o casi al final,  lo cual es una imprudencia en un blog donde llegan impacientes lectores,  y que usa la Biblia para apoyar lo que él dice, pues hago como los de la parábola del Buen Samaritano, paso de largo y no leo nada; pero si en cambio miro que está desarrollando un punto teológico o exponiendo la Palabra del Señor, me detengo y lo leo. Aquello para mí  es intrascendente, como la moda y las opiniones y gustos sociales, es temporal, la Biblia no.

Siendo más personal, ¿por qué comenzaste a escribir un blog y subirlo al internet? Quizás tu motivación original fue tu disfrute, ver algo tuyo expuesto al público. Después quisiste saber si a los lectores les gustaba o no y estabas pendiente a que hicieran comentarios, y saboreabas cuando eran muchos y compartían tu punto de vista en la exposición. De ese modo llegaste a saber nombres en distintas partes del mundo y casi se hicieron tus amigos. Fue un periodo de oro para tu blog y corazón, y con entusiasmo querías escribir casi todos los días y entrabas con frecuencia a tu página para verla, leer tu escrito y mirar si alguien te había dejado algún mensaje.Suponiendo quee lo hayas creado para algo más que socializar.

Al otro día ibas corriendo a contar las visitas que tuvo tu blog y las estudiabas, si eran los mismos o habían llegado algunos nuevos, y observabas el gráfico de estadísticas que te proveía tu página. Le cambiaste el 'look' a tu portada, la hiciste más hermosa y variados los asuntos y por ello algunos te felicitaron y otros te decían la bendición que era para sus vidas lo que Dios te inspiraba a escribir. Sin embargo desde hace un tiempo las cosas no siguen igual, los comentarios han cesado o son pocos y el número de visitantes ha disminuido descorazonadamente, y eso te ha entristecido, y como quien no tiene ánimo para comer y asearse y no se muda la ropa, así no renuevas tus escritos y pasan varias semanas para que insertes una nueva entrada. A veces son cortas, otras noticias y lo más fácil, algún audio. Claro, también has tenido problemas personales y no tienes ganas de escribir. No eres el único, única, la blogosfera está llena de cadáveres de blogs, otrora vivos y coleando, ahora secos, tristes, dormidos o realmente muertos porque sus dueños han perdido el espíritu del entusiasmo. Están a punto de cerrarlos definitivamente y borrarlos del mapa del internet.

¿Qué pensarías de un pastor que tiene solo un puñado de personas que visitan su templo? ¿Cerraría la iglesia porque no vale la pena abrirla para tan poca gente? ¿Tres es poco? ¿Dos es muy poco? ¿Y uno solo da ganas de llorar? Pues sí, tres son pocos, dos es triste y por uno solo se pudiera llorar, pero ¿no dijo Jesús que él visitaría las reuniones así menguadas de dos o tres personas? Si cerramos la iglesia porque son pocas las almas que vienen ¿no demostramos la perversidad de nuestra motivación, que lo que nos interesa son los números para alimentarnos con ellos y aplaudirnos y no la gloria de Dios? ¿Vale tan poco una sola alma que no amerita atenderla con lo mejor?  El autor de Hebreos dice que aún no hemos resistido hasta la sangre. Hay que perseverar, escuchen o dejen de escuchar, lean a dejen de leer, vengan muchos o pocos, el templo tiene que abrirse como de costumbre y la página del blog lo mismo, aunque la visite un solo lector en todo el mundo. Y gloria a Dios por él.

Comentarios

  1. muy buena ... suele suceder. Hay que enfocarse en trabajar para la Gloria de Dios y no para la nuestra, es verdad

    Saludos Pastor

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  2. Saludos, Viviana, lo mejor del Señor para ti y tus críos.
    Afecto sinceros,

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  3. Muy buen articulo hermano Humberto. Dios le continúe bendiciendo!

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  4. Kquijada, Dios bendiga tus blogs, y lleven un pedacito de Cristo en todos ellos. Saludos,
    Humberto.

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  5. Hola colega bloguero y hermano en Cristo, me gustó mucho lo que escribes y estoy de acuerdo con ello. Que Dios te bendiga!

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  6. Hola, Edmundo, excelente que tu arquitectura, hijos, y demás te dejen algún tiempo para disfrutar tu blog y el de otros. Un abrazo,
    Humberto.

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  7. Pastor la motivacion de esta generacion esta
    adulterada,tiene ojos para ver y no ven,oidos
    para oir y no escuchan.[Mateo 11:15,16,17]Los
    verdaderos siervos de Dios siguen adelante,escribiendo y predicando aunque sea
    un solo oyente o lector. Un abrazo.
    Hno.Mejias

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  8. Oh sí, hermano Mejias, tenemos que seguir haciéndolo “escuchen o dejen de escuchar”, porque al menos así sabrán que “hubo profeta entre ellos”. Ore por todos los predicadores del mundo, en cada país, para que venzan el desaliento que sopla de parte de Satanás sobre sus trabajos, y sobre la lucha interior entre el deber impuesto y los menguados resultados, si es que los hay o se tardan en aparecer.. Otro abrazo para usted.

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