Antes que el varón acepte el primer cigarro de marihuana
Como Manasés se humilló tan tarde, ya sus hijos habían aprendido la religión falsa que les había visto practicar. Los hijos de Manasés no copiaron las experiencias espirituales suyas. Su vida de oración no les impresionó, su cambio repentino en la gracia no los inclinó a buscar ellos lo mismo. Nunca imitaron su nueva vida sino la vieja, la que le habían visto vivir desde la niñez. Manasés nunca los pudo apartar de los pecados en los cuales los había iniciado. Ahí vemos a Amón repitiendo las maldades que le había visto hacer a su papá.
Padre, conviértete pronto, no dejes que tus hijos vayan copiando el mal ejemplo; mientras más retardes tu conversión peor para ellos; los verás vivir como vivías y ya no querrás haber vivido como viviste; deshace con tus sanas palabras las malas que dijiste, con tu sobriedad la embriaguez, con tu fidelidad la infidelidad, con tu fe la incredulidad, con generosidad la avaricia y la tacañería; lee libros santos que se opongan a las pornografías que leíste, programas de televisión sanos que reemplacen los indecentes, un hombre nuevo en un cuerpo antiguo, con hábitos nuevos, reflejando la gloria de Dios y no las costumbres del diablo....mientras más rápido te conviertas mejor. ¿Qué harás tú el día del juicio de todos los hogares si oyes a tus hijos testificar que tú los indujiste al pecado y lamentar haber sido tus hijos?
Cada día que pase sin convertirte es un día que perjudica a tus hijos, un día que los fortalecerá en la incredulidad. Conviértanse pronto padres, antes que les enseñen a sus hijos la teoría de Darwin en la escuela, antes que le minen la cabeza con relativismo moral, antes que hagan malos amigos y caigan en pandillas, antes que la niña practique su sexo temprano y seguro, antes que el varón acepte el primer cigarro de marihuana.
Hola pastor Humberto:
ResponderEliminarYo doy infinitas gracias a Dios porque a mi marido y a mi no permitió tener hijos tempranamente, estando ya nosotros "enrielados" en Su Palabra.
Ayer meditaba en esta frase "Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón" (Mateo 6:21) y estaba feliz y cobn mucho gozo de saber que Dios cambió mis prioridades, abandoné mi carrera profesional para cuidar de mi casa, de mi marido y de mis hijos, y lo hago feliz, me llena por completo, cosa que hace unos 10 años atrás era impensable.
Me di cuenta que estamos completos en Cristo y en Su Palabra, en hacer su voluntad, y no hay nada en el mundo que valga mas que un solo segundo en la presencia de Dios, sabiendo que somos agradables a El cuando le obedecemos...
Saludos en Cristo,
Viviana.
Hola Viviana, muy decidida y con fe tu decisión. Cuesta mucho hacerse profesional y tuvo que ser una decisión bien pensada, supongo que difícil para ambos y los ajustes presupuestarios que tuvieron que hacer, dejar tu carrera para convertirte en esposa y madre, y además pasados los años sentirte sin pesar ni arrepentimiento. Las norteamericanas profesionales también han comenzado hacer lo mismo, regresan a casa, cuidan los hijos, pero ellas vuelven al trabajo cuando los niños están en la escuela. Dios te siga bendiciendo. Saludos a tu esposo.
ResponderEliminarSi pastor, de hecho esta decisión tiene que ver con las edades de mis hijos, son demasiados pequeños para dejarlos al cuidado de una empleada (o nana, como se les dice acá)... Si en un futuro, cuando ellos esten mas independientes, yo creo que podré trabajar medio tiempo (si es que Dios me lo concede) justamente en el horario de clases de ellos, pero por mientras es muy necesario que yo este con ellos.
ResponderEliminarCon mi marido tuvimos que arrendar una casa "chiquitisima" por esta decision... pero nada vale mas la pena que hacer la voluntad de Dios, aunque la casa sea chica y no estemos tan holgados economicamente, prefiero la paz que da el Señor.
Bendiciones.
Viviana, el tiempo, incomodidades y dinero invertido en los hijos, aunque no son una inversión económica, vale la pena, claro si se les educa bien (que no es sólo criarlos), con cariño, teología y ética cristiana. O sea, si reciben formación, y la influencia del hogar llega a ser superior a la de la escuela y a la presión o admiración por los amigos, si se les enseña a vivir cristianamente como un desafío. Entonces cantarán himnos a nuestro lado en la iglesia y no fumarán. Bendiciones.
ResponderEliminarEste texto no solo va dirigido a inconversos presentes, o conversos pasados, sino también a todos los creyentes, ya que la enseñanza es aplicable a todos. Como cristianos, este mensaje es un muy buen consejo que nos insita a examinarnos a nosotros mismos, no solo para saber si estamos en la fe, sino para ir guiando nuestra vida conforme al propósito de Dios para nosotros como padres.
ResponderEliminarAún soy joven, y si Dios así lo quiere, me case el año que viene, pero siempre es bueno oír consejos de hombres maduros llenos del Espíritu de Dios.
Gracias por este consejo pastor, porque como jóvenes estamos acostumbrados a estar con jóvenes, y eso, como dice Paul Washer: "nos vuelve más torpes". Debemos apegarnos a hombres maduros en la fe, para crecer como hombres, con una mentalidad madura y firme en la fe. Por eso constántemente reviso sus escritos, porque me permiten pensar como adulto, vivir como adulto, buscar al Señor de manera correcta y aprender, ya no los primeros rudimentos de la Palabra, sino seguir en busca del alimento sólido.
Cuando era niño pensaba como niño, juzgaba como niño... pero ahora, he dejado las cosas de niños.
Debemos ser maduros en la forma de pensar, pero como niño en la malicia.
Gracias pastor. Su escrito me ha permitido reflexionar profundamente.
Dios le guarde
Muchas Gracias por sus gratificantes palabras Pastor, realmente hay muchas cosas que uno las vive a diario pero no las descubre en su verdadera dimension hasta que las ve reflejadas desde la palabra de Dios. Es una bendicion poder conocer al Señor y mas aun poder conocer lo que el desea que nosotros hagamos en esta tierra, con mucha conviccion, reflejando el caracter de Cristo Jesus en cada una de nuestras actividades, pensamientos e intenciones. Realmente no hay mayor bendicion como padre que poder transmitir esos valores y principios a esos milagros de vida que Dios nos ha dado para poder crecerlos y disfrutarlos. Que Dios le bendiga Pastor,
ResponderEliminar¡Qué agradable sorpresa mi querido y estimado hermano Humberto! También estoy leyendo a los reyes, y me agrada muchísimo encontrar sus meditaciones como la que ha puesto. ¡Nunca lo había visto de esta manera! ¡Muchísima enseñanza!
ResponderEliminarA Dios gracias, que cuando nos unimos en matrimonio, tanto mi esposo como yo, ya éramos de Él y el Señor nos ha permitido poder levantar a nuestros tres hijos en sus sendas. De recién casados, quisimos irnos de misioneros, pero es Dios quien tiene ya las obras preparadas para nosotros, así que no nos lo permitió -Él tenía otras cosas mejores para nosotros-, y después de 4 años, nos envía hacia el Puerto, y es ahora mi hijo el mayor el que está realizando lo que nosotros siempre quisimos de jóvenes. Eso no quiere decir que dejamos de hablar de Cristo a otros, ¡de ninguna manera!. Él nos permitió incluso, participar con mi papá a levantar una nueva iglesia que es en la que estamos actualmente. Hemos pasado por todo, tal cual lo platica Viviana, pero nos sentimos bendecidos. Gracias por compartirnos de sus bendiciones también.
En el amor de Cristo.
AR, siento gozo en el Señor que mis exposiciones te ayuden. Vas a realizar la unión más feliz, provechosa y difícil del mundo: Casarte, y tener hijos si Dios se los da, que embellecerán como flores tu jardín. Tengo dos o tres ventajas para escribir estas cosas, Primero, ya soy viejo pero fui joven y me acuerdo de eso para comprender a los que ahora como tú viven esos volcánicos tiempos. Tengo hijos que son jóvenes y soy su amigo, y eso me obliga a pensar en los jóvenes, y además soy pastor tanto de viejos como de jóvenes y niños, varones y mujeres, educados e iletrados, y todo eso, como soy pecador y un “tizón arrebatado del incendio” y conozco la gracia, el perdón y la misericordia de Dios, me ayudan a compilar experiencias, que no me dan fe pero sí conocimientos. Llevo en mi alma las marcas del Señor Jesucristo…y las ígneas cicatrices de los dardos del diablo. Yo en tu lugar haría lo mismo. El vino añejo, dijo un maestresala, es el mejor. Un joven es una promesa pero ¡quién sabe!, la vida es dura. Cuando el diablo arruina a un joven anula una promesa, cuando hace caer a un viejo cristiano, destruye una historia.
ResponderEliminarAgustín, gracias por comentar, conozco las excelencias tuyas como padre, esposo y cristiano, sin mencionar que eres un gran diplomático. Es cierto que es nuestro deber y privilegio reflejar el carácter del Señor en todo y con todos. Si vuelves a tu país te echaremos de menos, como dijo Jonatán "porque tu asiento estará vacío". Bendiciones.
ResponderEliminarIsa, gracias por tus inspiradoras notas autobiográficas. Si vuestro hijo es un predicador de la Palabra, como padres habéis tocado el cielo con las manos. ¡Oh qué un hijo nuestro estudie los misterios de Dios, los entienda, se edifique y edifique a otros con sus comentarios! ¡Qué privilegio que nuestros hijos nos igualen, sustituyan y nos excedan! Si llegara a ser un fiel ministro de Jesucristo, si Dios lo llama y lo tiene por soldado, que sepa que no es cosa de juego, esa vocación no es un juguete, es un combate perenne, y terrible y honrosa, sublime e “infernal” porque el aire se llenará de enemigos en contra suya, y se dará cuenta que no hay vuelta atrás, no es permitido la huida, hay que seguir en ella y pelear hasta morir, hasta la sangre dice Pablo. Si están al frente de una iglesia sabrán lo que digo. Gracias por recordarme que las obras que hacemos, los caminos que tomamos son preparados por Dios, y debemos sentirnos felices con ellos. En el amor de Cristo.
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