Si la melancolía no se quita con oración
1 Reyes 19:4 “Y él se fue por el desierto un día de camino, y vino y se sentó debajo de un enebro; y deseando morirse, dijo: Basta ya, oh Jehová, quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres”. “Y deseando morirse”. No tiene razón suficiente para sentirse así; pero ¿quién lo podrá culpar si nosotros tenemos similar experiencia, como lo deseó Jonás y Job? Quizás pensó que su experiencia con Dios había sido tan grande que al saberse todo el reino de Israel se volvería a Jehová, incluyendo a la reina Jezabel; y que cuando la noticia alcanzara su presencia caería arrodillada ante Dios. Pero no fue así, su vivo celo por Jehová en contraste con, según lo sentía, su fracaso vocacional, lo vendió a la depresión (v. 10) y prefería morirse a continuar siendo un profeta. Elías no deseaba la muerte porque no amara la vida sino porque pensaba que su ministerio era un fracaso. También pensaba que la causa de Dios estaba perdida. En todo estaba equivocado. ¿Vas a dejar tu ...