Cola serán otros pero no tú
Deuteronomio
28:2-14
Es como
si el Espíritu Santo registrara toda la vida humana y dijera: "no quedará
un rincón de ella que no reciba bendición mía". Aquí no dice que Dios te
bendecirá si tú le envías dinero a un
evangelista de televisión, sino que te irá bien si obedeces los mandamientos de
Dios. No hay ninguna promesa en el texto
que se refiera a bendición después de la muerte; con eso Dios quiere ser
nuestro Dios en esta tierra. Hay en el NT muchas en el cielo pero aquí ellas no
se mencionan. No es lo que vamos a recibir en el más allá sino como vivir en el
más acá.
Medita
especialmente en los vv.8,12 donde dice, “y sobre todo aquello donde pusieres
tu mano…”; si no te apartas ni a derecha o izquierda de la ley de Jehová, si la
meditas para ponerla por obra (Jos.1), puedes estar seguro que las bendiciones
en este mundo te alcanzarán. Y además añade que tendrás lo suficiente como para
darte el lujo de prestar y no pedir prestado, “prestarás…”. En sentido general,
si tienes que pedir prestado a otro es que te faltan bendiciones. No me refiero
a un banco sino a un amigo. Y a un usurero, jamás.
Ponte
eso en tu corazón, y la vida te enseñará que lo que dice el Señor es cierto,
que si confiesas tus pecados al Señor y le das gracias, si andas conforme a sus
mandamientos con gratitud y amor hacia él, nunca, jamás de los jamases, serás cola. Eso, cola
serán otros pero no tú, Dios te pondrá enfrente y no atrás, no te quedarás rezagado
porque él te bendecirá, y si para otros no hay bendiciones, si las que tiene la gracia común se acaban para ellos, las especiales, las de la gracia,
que son tuyas por Jesucristo y que están reservadas en el cielo, no se agotarán
(v.44). Dios no miente. El paso de los años te hará aprender esa gran y sabia lección.
Comentarios
Publicar un comentario