No seas lento para cambiar de compañía y el modo de pensar
GENESIS 19:15,16
“Y
al rayar el alba, los ángeles daban prisa a Lot, diciendo: Levántate, toma tu
mujer, y tus dos hijas que se hallan aquí, para que no perezcas en el castigo
de la ciudad. Y deteniéndose él, los varones asieron de su mano, y de la mano
de su mujer y de las manos de sus dos hijas, según la misericordia de Jehová
para con él; y lo sacaron y lo pusieron fuera de la ciudad”
“Daban
prisa a Lot”, como si le dijeran “apúrate que queda poco tiempo, estas cosas deben suceder pronto, la
paciencia de Dios está llegando al límite, hay una hora fija y no habrá más oportunidad, lo que está determinado se derramará
(Dan.9:7). El tiempo de salvación no es indefinido ni infinito. Nadie sabe el día ni la hora sino Dios y por eso
hay que darse prisa. Hay gente que es lenta para salvarse, lenta para creer,
lenta para huir. Si Lot empezó con alguna prisa se fue parando hasta que se
detuvo, y los ángeles tuvieron que arrastrarlos fuera de la casa.
Señor, a
veces no basta con tus amonestaciones para que huyamos de la ira venidera
y tienes tú que sacarnos personalmente del sitio de juicio. Los sacaron no por
las virtudes de ellos sino conforme a
la misericordia de Dios. Fue la segunda vez que las manos de los ángeles
asían de Lot. Si el Señor no asía de Pedro el apóstol se hubiera hundido
(Mt.14:30,31). Siempre tenemos “acá
abajo sus brazos eternos” (Dt.33:27). No seas lento para dejar el mundo
y el pecado, abandonar las malas compañías, cambiar de modo de pensar y huir hacia
Dios.
Comentarios
Publicar un comentario