El ministerio de quitar dudas

Daniel 5:10-12
"Fue hallado en el entendimiento para interpretar sueños y descifrar enigmas y resolver dudas".


La palabra también significa desatar nudos, resolver enigmas, acertijos y problemas. Se afirma que Daniel era un experto en resolver dudas o problemas difíciles, esto es en "desenredar líos, zafar nudos, descubrir acertijos".
Piensa primero en la duda relacionada con  los apóstoles, pastores, maestros y evangelistas. Yo quiero resolver mis dudas, no puedo acercarme al final sin que estén resueltas. Lo deseo para poder disfrutar con gusto las cosas celestiales y no perderme la bendición de vivir en el Espíritu. No quiero tener dudas porque me torturan, me hacen sentir como un hipócrita, me separan de aquellos que amo y admiro, demuestran la posibilidad de mi apostasía. No deseo para nadie la duda de su fe.

No quiero tener dudas sino que todas sean resueltas porque como un maestro, enseño la palabra de Dios y ¿cómo enseñar como verdad aquellas cosas que no estoy seguro que lo sean? ¿Cómo incitar a los hombres que dejen este mundo si no estoy seguro que haya otro? ¿Cómo haré que los demás esperen el regreso de Cristo desde el cielo, la resurrección de sus cuerpos si no estoy seguro de lo uno ni de lo otro? ¿Y cómo pediré a los moribundos que estén tranquilos que pronto habrán de ver el rostro de Jesús, si dudo que tengan alma inmortal?

¡Oh que bendición pierdo sin un espíritu como Daniel que me resuelva mis dudas, como era Daniel para el reino, con sus palabras, su sermones, sus entrevistas, sus escritos!

Es feo sembrar dudas y desconfianzas pero es un bonito ministerio aclarar dudas. Jesús constantemente exhortó a sus discípulos a que no tuvieran poca fe y Pablo dijo a los hermanos que ayudaran a los que tenían dudas (Juan 20:27; 1 Te. 5:4; Judas 22).

Creo que fue Spurgeon quien dijo que las dudas son “extravagantes”. Son fantasmas aparatosos y  sin consistencia que flotan en la mente sin dejarse mirar de frente, vistiéndose de lógica con  atuendos de superchería, engaño y fraude.

Mata tus dudas con la espada de la Palabra de Dios. Si no has podido creer por el tamaño de ellas, pide la ayuda de algún varón de Dios como Daniel que sea hábil en resolver dudas, compra libros escritos por hombres de fe, lee las biografías de sus vidas, no prestes atención a los que van por el mundo sembrando incertidumbres, oye sólo al predicador que con pasión exponga Las Escrituras. En este mundo hay cada día muchas cosas que resolver pero dedica tiempo al ministerio de quitarte las dudas y quitárselas a otros. Anímate a contradecirlas porque son caprichosas y cobardes.

Comentarios

  1. Sabes?
    A veces, las personas a las que discipulo quedan decepcionadas cuando les digo que ni yo ni nadie, sabe la respuesta a tal pregunta.

    Pero esa es la realidad, no se nos ha dado saberlo todo, y así debe ser, pues el permanecer en ignorancia en algunos asuntos, nos pone en nuestro lugar.

    :\

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  2. Renton, cuando dices francamente que no comprendes algo en la Escritura, por ejemplo, muestras humildad, reconoces tus limitaciones, y descubres que Dios es mayor. "Está bonito eso que nos pone en nuestro lugar". Con los pies en la tierra, de donde venimos.

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