Échale pólvora a tu lenguaje



Aún hay lugar, fuérzalos a entrar para que se llene mi casa (Luc.14:22).

Hemos aprendido que la salvación es voluntaria, porque el pecador se ofrece voluntariamente para ser salvo en el día de Su poder (Sal.110:3). ¿Por qué el Señor nos envía a obligarlos a entrar, forzarlos? Porque quiere que seamos más impetuosos y fervientes en nuestro evangelismo. Muchas veces somos demasiado corteses, excesivamente delicados y por eso fallamos. Aceptamos  excusas fácilmente, admitimos que se escondan en sus refugios y no los sacamos de ahí, nada le voceamos, empleamos poco para persuadirlos hacerse cristianos (Hch. 26: 28). Para salvar un alma hay que asediarla, rondar en su búsqueda, perseguirla, acosarla, empujarla a fuerza de oración y argumento afuera de su pecado.

Las casas del Señor se hallan vacías, hay lugar aún para muchos, la comida allí es deliciosa, pero los comisionados a buscar las almas y traerlas para que oigan el mensaje apenas ofenden a nadie ni lo entusiasman, no dicen nada que pueda ser tenido como un reproche y compunja el corazón. Por eso todavía las sillas vacías son testimonio de que aún hay lugar.

No es el deseo del Señor que su casa esté vacía, sino que se llene, si hoy somos pocos  debiéramos ser más, si faltan asientos para ser ocupados hay que llenarlos, el Señor no se regocija mirando su casa desierta o semillena, ni nosotros tampoco, él quiere que se llene y que muchos vengan a compartir con los que ya han entrado, el delicioso alimento que ha preparado su Espíritu Santo.

Saca toda tu artillería mensajero de salvación, pregona a voz en cuello que Jesús reina, afila tu espada,  llena de plomo tu arma, échale pólvora a tu lenguaje, empapa tu esponja con vinagre (recuerda que la miel en los sacrificios estuvo prohibida, Lev. 2: 11), impúlsate tú mismo hacia delante en un combate frente a frente en la línea de batalla, con la bayoneta de la Palabra calada y pon en jaque, con tus conocimientos, a los enemigos de tu Rey. Hay que salir por ellos, oblígalos con las armas espirituales, que expresan el amor de Dios, a que se postren ante el Rey de reyes, empújalos con frases bíblicas a que traspasen la puerta estrecha.

Comentarios

  1. Anoche una hermanita recién convertida me explicaba su primera salida evangelística.

    Qué miedo, me decía... y es verdad, da miedo, porque nada arruina tanto el Ego como salir a predicar entre los ninivitas, y eso nos aterra.

    Felicidades por tu entrada nº 700 Humberto!

    :]

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  2. Renton, tienes razón, uno no sabe cómo la persona va a tomar lo que le digamos; sin embargo ayuda la estrategia de no abordar el tema en un principio impetuosamente sino conducir hasta el asunto de forma gradual, casi que sin que lo note, tocando dentro del mismo algún punto de interés como hizo Pablo con los atenienses y "el Dios no conocido".

    Cuando se encuentra un sitio donde no puede aparecer la apologética, desde ese lugar uno se puede trasladar fácilmente hacia la dogmática de la fe (se puede usar el lenguaje bíblico sin nombrar la Biblia para que no se asuste) y al menos por un breve tiempo el asunto es escuchado, como quien dice se le ha puesto con una cuchara el alimento en la boca, y tiene la opción de gustarlo, saborearlo y masticarlo, y tragarlo o escupirlo; entonces ahí se acabó el esfuerzo y la evangelización; pero lo que se ha dicho, dicho está y el resto corresponde al Espíritu Santo.

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  3. Pienso,pastor que al pecador se fuerza a entrar cuando nuestra vida concuerda con lo que proclamamos;tenemos que,no solamente predicar sino tambien vivir lo que creemos
    de manera que el que oye tambien vea,y si el que oye y ve es uno de los escogidos la gracia de Dios lo forzara ha entrar sin duda alguna.
    Abrazos,Hno.Mejias

    que el oye tambien vea, y si el que oye y ve es escogido entrara sin duda

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  4. Hermano Mejias, es asombroso lo fácil que uno ve a un pecador entrar a la salvación cuando le llega la hora; Dios lo provee todo, intercesiones, predicaciones, testimonios, y con esos medios de gracia santificados, entra.

    Todos tenemos nombre, fecha, día y hora de nacimiento, salvación y muerte en el calendario de Dios. Como usted subraya, el testimonio cristiano es de lo más importante.

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  5. Hno. Humberto bendiciones. Acabo de ordenar su libro de Apocalipsis, de vez en cuando entro a su blog para leer algo que sea edificante [de hecho la mayoria de lo que escribe es edificante] porque nos hastiamos de escuchar u oír tanta tontería. En cierta forma también es muy reconfortante saber que Dios en su eterna y perfecta soberanía estableció todo, los tiempos, las edades, los cambios [buenos y malos] y cada uno de los segundos de la historia de la tierra, y aun ahí pensó en el tiempo del hombre, para su salvación como para su condenación, creo que no podemos hacer más de lo que está establecido que podemos hacer y debemos hacer, dar el mensaje a otros es un placer, si te aceptan esas personas son dignas, sino, sacúdete el polvo y ve a otros, no les ruegues ni les llores [Mat. 10:13-15] ni hagamos “campaña de ayuno y oración por ellos”, porque los que deberían hacerlo serian ellos y no nosotros [Jon. 3:6-9] que haremos por los “muchos” cuando Dios mismo no estuvo dispuesto a hacer algo por ellos! Salvo animales en vez de almas [en el diluvio]; el confort está en saber que Dios es Altísimo y total Soberano y quien le dirá que haces? Ni aun nosotros! Tranquilos y serenos esperemos el tiempo de la redención de todos los escogidos, no como algo de alardear sino agradecidos eternamente que nos tubo por dignos de su llamado. La Teología Calvinista es la solución para las alucinaciones y para sueños sin fundamento, pero también es una guía perfecta para lo más angustiante del alma respecto a cómo pensar, se calme. No es Dios con nosotros, es Dios “POR” nosotros [Rom. 8:31] y si es así, que contestaran que neciamente enseñan una teología deficiente como Arminio? O el Pentecostalismo? [que de hecho estos son hijos de aquellos] Que dejan toda la responsabilidad a los muertos? Inverisímil.
    Hno. Humberto bendiciones, su blog es de bendición y se lo importante y reconfortante es saber que a alguien es de bendición el esfuerzo que se hace.

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  6. Enrique González6 de marzo de 2012, 20:33

    Mi hermano Humberto, ¡felicitaciones! Estoy seguro que el Señor premiará tu esfuerzo más de lo que hasta ahora ha hecho. Regar la semilla no es una tarea fácil. Todo depende de la manera en que lo haga el sembrador y tú has tomado la tarea con la convicción de que la cosecha contará con la bendición del Creador.
    ¡Que Dios te bendiga y te siga usando!

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  7. Oh mi gran admirado hermano Enrique, tú me has ayudado en la distribución de exposiciones bíblicas editando mi libro Apocalipsis, el libro de un desterrado.

    Gracias a Dios por tu amoroso trato y por el servicio que prestas a la obra del Señor en Miami.

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