Viviendo “del aire”, o con dinero
Deuteronomio 8: 3 “Y te afligió, y te hizo tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido, para hacerte saber que no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de Jehová vivirá el hombre”. Dios enseñaba a su pueblo a que viviera por fe, a que anduviera en el Espíritu. ¿Por qué tenemos que comer cada día? Porque somos dependientes de la nutrición. Se come para reponer el cuerpo que se gasta, para evitar el deterioro, la enfermedad y la muerte. El alimentarse es una forma de evitar sucumbir y los creyentes cuando comen deben dar gracias a Dios por los alimentos que creó para que el hombre prolongara su vida sobre la tierra (1 Ti. 4: 3). Sin embargo en un estado de perfecta comunión en la presencia de Dios no se necesitaría comer ni beber. Moisés estuvo cuarenta días sobre el monte y no comió ni bebió nada y no sólo no se murió sino que descendió muy saludable y resplandeciendo gloria. Moisés que lo conocía por expe...